¿Cómo medir la sensación de alejamiento, de la distancia? Estar lejos ¿de dónde?, ¿de qué lugar? ¿Dónde está ese punto de nuestro planeta que a medida que lo dejamos atrás tenemos la impresión de encontrarnos cada vez más cerca del fin de la tierra? ¿Acaso es un punto en el sentido meramente emocional (mi casa como centro del mundo)? ¿O cultural (como, por ejemplo, la civilización griega)? ¿O religioso (como La Meca)? Al preguntársele qué considera el centro del mundo: ParÃs o México, la mayorÃa de la gente responderá: ParÃs. ¿Por qué? Al fin y al cabo, la ciudad de México es más grande que ParÃs y, al igual que ella, tiene su metro, y sus monumentos importantes y sus grandes obras de arte, y sus magnÃficos escritores. Y no obstante dirán: ParÃs. O que alguien declare que para él el centro del mundo es El Cairo. Al fin y al cabo, es más grande que ParÃs, y los monumentos, y la universidad, y la pintura… Y, sin embargo, ¿muchos apoyarÃan El Cairo? De modo que queda ParÃs (en cualquier caso, quedaba cuando la asustada Jeanne atravesaba Siberia con el corazón en un puño). Queda Europa. La europea es la única civilización que ha tenido y que (casi) ha satisfecho su ambición de universalidad. Otras civilizaciones, convencidas de abarcar el mundo entero, no pudieron satisfacerla bien por motivos técnicos (como los mayas), o bien porque nunca mostraron tal interés (por ejemplo. China).
Ryszard Kapuscinski. El imperio.
(Arriba, un dibujo que hice hace unos años en los Annapurnas)