No entiendo la fascinación de los ilustradores con el iPad, útil cacharro del que he llegado a leer que es el “ultimate sketchbook”. El 90% de los trabajos que voy viendo se hace asÃ: tomas una foto y la repasas a mano para conseguir algo similar a un mal filtro de Photoshop. No vuelves a levantar la vista para observar lo que tienes alrededor porque la mirada debe estar fija en la pantalla. Olvidado queda el placer de ver cómo se seca la pintura sobre el papel. Para qué. Eso es lento y estamos en la era de la inmediatez.
Arriba, dibujo sin alma de Mariscal hecho con este sistema.
Pues tiene la tira…
Con todos mis respetos a gente de tu categorÃa en el dibujo. No se puede ser tan simplista.
Mis ejemplos no son muy buenos, pero….
http://devueltaconelcuaderno.blogspot.com.es/2012/08/feliz-cumpleanos.html Un ejemplo de dibujo, color en iPad y montaje en el mismo.
http://mimujando.blogspot.com.es/2012/08/olimpic-games.html Dibujo digital sin foto previa.
Y hay infinitas posibilidades, todo depende de quién quiera empobrecer los medios.
Saludos.
No he explorado tanto el tema como para comprobar si es cierto ese 90% que dices. Yo he usado el iPad igual que una libreta, mirando lo que tengo delante y pintando sobre la superficie con un lápiz, y creo que una cosa no quita la otra, que uno puede usar papel y tabletas como puede hacer cine en celuloide o en soporte digital, o tener a la vez un Tamagotchi y un gato de verdad. Igual que no entiendes la ‘fascinación’ con el iPad, yo tampoco entiendo el rechazo visceral que despierta en muchos ilustradores. Me recuerda el que tuvieron los fotógrafos hacia la fotografÃa digital en sus comienzos.
Si usas la superficie como si fuera un papel, el resultado puede aproximarse a dibujar y luego escanear el papel, ahorrándote un paso. Por supuesto que no proporciona el placer del que hablas, pierdes el placer del ‘original’ que se toca y se huele. Pero ése no tienes por qué perderlo: usar un iPad no implica dejar de usar los cuadernos.